Intel y MediaTek son dos empresas con estrategias diferentes, pero en ambos casos están obteniendo muy buenos resultados entre los fabricantes chinos de tablets con marca blanca. La razón de este aplastante éxito que podría poner en apuros a la competencia es el modo en que cada uno está compitiendo.
Aunque el iPad de Apple es considerado por muchos como el mejor tablet que el mercado actual puede ofrecer, hay una realidad muy difícil de negar, y es que Android se ha hecho con la mayor parte del mercado desde hace ya bastante.
El hecho es que buena parte de este mercado le pertenece a la plataforma de Google gracias a los fabricantes de tablets con marca blanca, mismos que abundan como el arroz en China. Hasta no hace demasiado esos fabricantes habían tenido sus alternativas bastante claras, hardware de tercera pero extremadamente económico, una alternativa demasiado tentadora para los mercados emergentes, urgidos por dispositivos en ronden los 100 dólares.
Encargados de la producción de los cerebros de esos tablets han venido estando marcas como Rockchip, que viene proveyendo chips desde los tiempos del iPed, además de otras casas como Amlogic y Allwinner, todos con alternativas que se quedan un paso atrás respecto a la competencia, pero lo suficientemente económicas para apostarse como opciones muy económicas que puedan abordar el mercado.
Pero desde hace algunos meses Intel y MediaTek vienen entrando de a poco a ese mercado, sin ser demasiado presuntuosos tienen toda la voluntad para arrebatar el mercado a las marcas ya establecidas, cada uno con un planteamiento bastante diferente, pero con lo necesario para adueñarse del mercado.
MediaTek, chips económicos y potentes
Mientras Rockchip y compañía han apostado por sacrificar potencia para mantener precios extremadamente bajos y buenos margenes de ganancia, sabemos que hay empresas como Nvidia que apuestan justamente a lo contrario, elevar en extremo las prestaciones, con un aumento equivalente en términos de costos. MediaTek intenta plantarse en un punto neutro.
Lo hemos visto en los últimos meses. En MediaTek no les importa venir desde abajo, y quieren jugar en igualdad de términos con grandes como Samsung y Qualcomm. Es así como dejando de lado la tradicional estrategia de solo apostar por chips en extremo económicos, han decidido apostar por todos los segmentos.
De este modo ahora MediaTek tiene un completo catalogo para ofrecer a sus clientes, entre lo que se puede detallar procesadores A7 a cuatro núcleos, a ocho núcleos, e incluso SoCs compatibles con la arquitectura big.LITTLE, que implementan núcleos A17 de alto rendimiento.
Es precisamente esta estrategia agresiva la que le está valiendo un lugar destacado en el mercado, y seguramente en los años venideros le veremos destacar como uno de los principales fabricantes de procesadores. Como muestra del éxito que está teniendo la empresa, en contraste con los 20 millones de chips que pusieron en el mercado el año pasado, sus proyecciones para este año hablan de 40 millones de procesadores distribuidos entre fabricantes.
Intel, subsidio extremo
En Intel tienen una estrategia diferente a la seguida por los taiwaneses, pero no por ello menos exitosa. El principal problema que tiene que afrontar la empresa es que sus procesadores son más costosos y aún les cuesta jugar en igualdad de términos con lo que los diseños basados en ARM pueden ofrecer.
El año pasado la empresa americana adelantaba cómo planeaban abordar el problema. Rebajar los costos de sus chips hasta ponerlos al nivel del costo de los procesadores ARM promedio, y el resto pasa por dejar que la buena fama de la empresa y el buen hacer de sus procesadores se encarguen del resto.
La palabra clave en todo esto es subsidio. Intel subsidia sus procesadores para abrirse hueco en un mercado que le está oponiendo demasiada resistencia. Y es que pese a todos sus esfuerzos, el año pasado solamente lograron poner 10 millones de chips en el mercado tablet, por lo que debían hacer algo sí o sí.
Puede parecer descabellado que una empresa de la talla de Intel tenga que subvencionar sus procesadores para que los tablets que los montan se puedan comercializar, pero debemos recordar que en la breve historia de los tablets, los chips ARM han dominado con mano de hierro, y con un mercado en el que los dispositivos móviles son el futuro, Intel debe abrirse un hueco a toda costa si no quiere que su nombre se convierta en un distante recuerdo.
Con tan importante cambio, se espera que pronto se dejen ver tablets Intel que ronden los 100 dólares, con lo que la empresa espera poner 40 millones de chips en el mercado para este año. Ese ritmo de crecimiento podría ser todo lo que la empresa necesita para volver a jugar al máximo de su capacidad.